TERCERA GUERRA MUNDIAL
En difundido y muy leído blog “Falsas Banderas”, jefes mundiales comenzando por Fidel Castro hasta Barack Obama hablan de la eminencia de una tercera guerra mundial; así como van las cosas, dicen ellos. Dichos pensamientos son duplicados por decenas de periodistas analistas (“politicólogos” así mismos dicen ellos ahora), políticos importante de segunda línea y científicos.

DESARROLLO: Realmente parece prácticamente imposible una guerra mundial en estos tiempos. El mayor instinto del ser humano es la auto-conservación y en el caso de una guerra termonuclear (que sería la única forma de una guerra mundial) y no solo los afectados directamente por las explosiones se volatizarían (de seguro Israel y la mayoría de los capitales de los países árabes y musulmanes (no todos los árabes son musulmanes), capitales y ciudades occidentales y orientales europeas, Washington D.C., NYC, Chicago, Atlanta (centro de comunicaciones civiles y militares USA), Moscú, Londres. París, Berlín, Tokio, Beijing, Los Ángeles, Texas, decenas de “sitios nucleares” (nuclear sites) en USA (entre otros en Alaska, Colorado, Nevada, Mississippi, y Nuevo México). Sitio nucleares en el Medio Oriente, Europa Oriental (entre ellos Odessa y Moscú) y wn Europa occidental.
Los que sobrevirian a las mismas explosiones termonucleares, fallecerían a corto y mediano plazo por la contaminación nuclear (entre ellos los jefes de gobiernos y sus familias). Posteriormente las nubes nucleares alcanzarían al África, Oriente, América del Sur, Oceanía, El Caribe y el último rincón del mundo.
¿Quién gana y qué gana, si no queda nada ni nadie? ¿Algunas alimañas y las alimañas humanas (mandatarios mundiales) que se escondan a vivir miserables vidas en los poquísimos refugios mundiales que existen en las proximidades de las capitales de los países muy avanzados? ¿Presos de sí mismos por tres o cuatro generaciones? ¿Qué vida, que soledad y que conflictos subterráneos se desarrollarían entre semejantes personas? Los demás, no nos podremos proteger ni en las cavernas del Valetodo.
Estamos locos, pero no somos suicidas, ¿o a lo mejor (peor), sí lo estamos?
Jorge Enrique Seoane
Metro Press & Photo
press@metroperu.com